SOCIALISMO, BUDISMO Y CRISTIANISMO

Friday, September 07, 2007

LA LOGICA DE LA COMPASIÒN



¿Qué es la compasión?


  • No es solamente una sensación de lástima o interés por la persona que sufre , ni es solamente un afecto sincero hacia la persona que tenemos delante, ni sólo un claro reconocimiento de sus necesidades y su dolor; es también la determinación sostenida y práctica de hacer todo lo que sea posible y necesario para contribuir a aliviar su sufrimiento. La compasión no es autentica compasión si no es activa. Avalokitesvara, el Buda de la Compasión, suele representarse en la iconografía tibetana con un millar de ojos que ven el dolor en todos los rincones del universo, y un millar de brazos para llevar su ayuda a todos los rincones del Universo .


  • Todos percibimos y sabemos algo de los beneficios de la compasión, pero la fortaleza especial de la enseñanza budista radica en que expone claramente una “lógica” de la compasión. Una vez la hemos captado, esta lógica hace la práctica de la compasión más urgente y amplia a la vez, y más estable y fundada, porque se basa en la claridad de un razonamiento cuya verdad se va haciendo más evidente a medida que se aplica y se pone a prueba.




  • Podemos decir, e incluso creer a medias, que la compasión es algo maravilloso, pero en la práctica nuestros actos están profundamente desprovistos de compasión y sólo consiguen producir mayor frustración y angustia, para nosotros mismos y para los demás, en lugar de la felicidad que todos buscamos.

  • ¿No es absurdo, pues, que anhelemos la felicidad, y en cambio casi todos nuestros actos y sentimientos nos alejen directamente de ella? ¿Podría haber mayor indicación de que todo nuestro concepto de lo que es la felicidad y cómo podemos alcanzarla adolece de un fallo fundamental?

  • ¿Qué creemos que nos hará felices? ¿Un egoísmo astuto y lleno de recursos, la egoísta protección del yo, que como todos sabemos, a veces puede volvemos terriblemente crueles? Pero, de hecho, lo cierto es todo lo contrario: cuando se contemplan realmente, se ve que el apego y el culto al yo son la raíz de todo el daño que les hacemos a los demás, y también de todo el daño que nos hacemos a nosotros mismos. Todas y cada una de las cosas negativas que hemos pensado o hecho han surgido en último término de nuestro apego a un falso yo, y de nuestro mimo y protección de ese falso yo, de convertirlo en el elemento más querido e importante de nuestra vida. Todos esos pensamientos, emociones, deseos y actos negativos que son causa de nuestro karma negativo son engendrados por ese aferramiento al yo y ese mimo del yo. Son el oscuro y poderoso imán que atrae hacia nosotros, vida tras vida, todos los obstáculos, todas las desgracias, todas las angustias, todas las calamidades, y por ello son la causa fundamental de todos los sufrimientos del samsara.