SOCIALISMO, BUDISMO Y CRISTIANISMO

Saturday, October 21, 2006

BIEN COMÚN


BIEN COMÚN PARA LA COMUNIDAD DE LA VIDA

Uno de los efectos más avasalladores del capitalismo globalizado y de su ideología política, el neoliberalismo, es la demolición de la noción de bien común o de bienestar social. Es notorio que las sociedades civilizadas se construyeron y siguen continúan construyéndose sobre dos pilares fundamentales: la participación de los ciudadanos (ciudadanía activa) y la cooperación de todos. Juntas crean el bien común. Pero éste fue enviado al limbo de las preocupaciones políticas, y su lugar fue ocupado por las nociones de rentabilidad, flexibilización, adaptación y competitividad. La libertad del ciudadano es sustituida por la libertad de las fuerzas del mercado; el bien común, por el bien particular; y la cooperación, por la competitividad. La participación y la cooperación aseguraban la existencia de cada persona y la vigencia de los derechos. Una vez negados esos valores, la existencia de cada uno no está ya socialmente garantizada, ni sus derechos asegurados. Por eso cada uno se siente forzado a garantizar lo suyo. De este modo surge un individualismo avasallador, que se pone de manifiesto en el lenguaje cotidiano: mi empleo, mi salario, mi casa, mi carro, mi familia... Nadie se siente motivado, por tanto, a construir algo en común. Lo único en común que queda es la guerra de todos contra todos con vistas a la supervivencia individual. En este contexto, ¿quién va a pensar en el destino común de la especie humana y de la única casa colectiva, la Tierra? ¿Quién se cuidará del interés general de los 6.300 millones de seres humanos? El neoliberalismo es sordo, ciego y mudo frente a esta cuestión fundamental. Y seria contradictorio suscitarla, pues defiende concepciones políticas y sociales directamente opuestas al bien común. Su propósito básico es éste: el mercado tiene que ganar, y la sociedad tiene que perder. Es el mercado el que habrá de regularlo y resolverlo todo. Y si es así, ¿por qué vamos a construir cosas en común? Se deslegitimó el bienestar social. Sucede, por otro lado, que el creciente empobrecimiento mundial es el resultado de las lógicas excluyentes y depredadoras de la actual globalización competitiva, liberalizadora, desregularizadora y privatizadora. Cuanto más se privatiza, tanto más se legitima el interés particular en detrimento del interés general, además de debilitar al Estado, el administrador del interés general. Es el triunfo del capitalismo. ¿Cuánta perversidad social y barbarie soporta el espíritu? ¿Qué es el bien común? En el plano infraestructural, es el acceso justo de todos a los, bienes básicos (alimentación, salud, vivienda, energía, seguridad y comunicación). En el plano humanístico, es el reconocimiento, el respeto y la convivencia pacífica. Por el hecho de haber sido desmantelado bajo la virulencia de la globalización competitiva, el bien común tiene que ser ahora reconstruido. Para ello hay que dar hegemonía a la cooperación y no a la competencia. Si no se produce ese cambio, difícilmente se mantendrá la comunidad humana unida y con un futuro que valga la pena.

Thursday, October 19, 2006

LA TOLERANCIA COMO CAMINO DE LA JUSTICIA (parte I I)

Dedicado a la buenamoza y tolerante ISALIV MATHEUS

¿Qué cosa es la tolerancia? Es un patrimonio de la humanidad.Estamos llenos de debilidades y errores : la primera ley de la naturaleza exige que nos perdonemos reciprocamente nuestras torpezas.

Voltaire , Diccionario filosófico

¨La tolerancia es un fruto de la duda. El democrático dice: creo estar en la verdad pero me podría equivocar, déjenme intentar y si los resultados de mis acciones son malos entonces tocará a ustedes el turno. El dictador dice: yo tengo la verdad y los resultados de mi actividad serán siempre buenos ; o conmigo o contra mí.

Norberto Bobbio , "Salvemini e la democracia"


La tolerancia y la justicia son virtudes paralelas o herma­nas porque ambas son relacionales, aunque con distinto sentido. A diferencia de otras virtudes (como la prudencia o el coraje) la tolerancia y la justicia no pueden ser predicadas en términos de un solo individuo y de sus actos. No son, estrictamente, sólo virtudes del carác­ter ni virtudes de la razón, sino en referencia a las múltiples relaciones que los individuos mantienen con otros indivi­duos. Tolerancia y justicia son virtudes de los individuos en sus relaciones, y son virtudes de las instituciones que en­marcan las relaciones entre los individuos. Sólo después, si esas relaciones pueden pensarse tolerantes y justas, decimos de quien las mantiene que es tolerante y justo y lo hacemos, precisamente, porque las mantiene. Toleramos a otro, recla­mamos ser tolerados por otro y, apoyándonos en ello, tole­ramos sus acciones y creencias y reclamamos ser tolerados en nuestras acciones y creencias. Si decimos que toleramos alguno de los actos o comportamientos de otro es porque son suyos, no nuestros; dependen de su voluntad o de sus creencias, no de las nuestras. En la tolerancia, nuestra vo­luntad o nuestras creencias tienen que hallar su relación con las de otro. Pero, la tolerancia no es sólo una virtud que se ejerce porque se refiere a la relación con otro; como vimos(parte I), también sucede, y paradójicamente, que esa relación es en cierto modo fruto de una demanda: reclamamos ser tolera­dos, se nos reclama que seamos tolerantes. Ese reclamo no es, de entrada, simétrico como lo es, por ejemplo, el inter­cambio de bienes o la simetría de la perspectiva moral y ju­rídica en la que suponemos la igualdad, moral y cívica, de todos. Eso se ve claro en la tolerancia clásica, negativa o ver­tical ‑que todos estos adjetivos le cuadran‑ en la que la re­lación entre soberano y súbdito configura la asimetría; pero también puede pensarse que la asimetría se da en relaciones más horizontales que parecían, de entrada, simétricas. In­cluso aquí el movimiento de la tolerancia parece arrancar de un requerimiento de alguien hacia otro y como una res­puesta de éste hacia aquél. Puede ser que, posteriormente, quien solicitó ser tolerado sea, a su vez, requerido a ser tam­bién él tolerante; pero, en cualquier caso parece que la de­manda a ser tolerado y la respuesta de la tolerancia no exi­gen simetría. Eso produce otra peculiar paradoja: por una parte, la tolerancia nace como forma de configurar el espacio público de tal manera que creencias diversas, modos de vida distintos, puedan convivir en ese espacio. En ese sentido, la tolerancia se habrá de institucio­nalizar en forma de simetrías: los derechos de todos y de cada uno. Pero la tolerancia nace de un movimiento de asi­metría, de una demanda de reconocimiento, de un requeri­miento de respeto hasta ese momento no atendido y, más bien, negado o no reconocido.La virtud relacional de la tolerancia parece, pues, más que una manera de ser o de hacerse de las instituciones y de los individuos (de configurarse aquéllas y de comportarse éstos), un movimiento por el que ambos alcanzan un punto de realización que pensamos, que idealizamos, como justo.
La tolerancia es,una peculiar virtud dinámica que busca cumplirse en términos de justicia. Y viceversa, cabe pensar que entre los motivos de la justicia, entre lo que lleva a realizar la justicia, estará la tolerancia. Porque no podemos pensar la justicia en un mundo plural, si no hay una reco­nocimiento equitativo, justo, de la diversidad. Cuando no es el caso, cuando la tolerancia aboca en injusticia, nos en­contramos con aquella flacidez y apatía de la voluntad y de la razón que,se consideraba debilidad moral o política,con la mala tolerancia. Si la tolerancia es virtud fuerte será, precisamente, porque su carácter dinámico conduce a la fortaleza de la justicia, no a la abdicación de la in­justicia. La mala tolerancia puede encontrar una de sus marcas en que se cumple como injusticia o, al menos, en que abdica de convertirse en justicia. Y precisamente, si la tolerancia se cumple en forma de justicia, y la justicia re­quiere de la tolerancia, podemos ver que ésta es virtud pública, una virtud que conforma, porque determina, las for­mas que llamamos justas de organización de lo público.

22-04-2002

Tuesday, October 17, 2006

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"Hace muchos años un campesino ignorante fue a visitar por primera vez en su vida un zoológico. En un determinado momento llego al recinto en el que se encontraba una jirafa y -durante un buen rato- visiblemente encolerizado, se quedó mirando al animal. Finalmente le dio la espalda y se alejó, murmurando con rabia: 'Un animal asi no existe'"
A. Oz, Terra d´Israele

Monday, October 16, 2006

LOS TOTALITARISMOS

Es lógico que, ante una situación difícil de desorden social, político y económico , el hombre busque una salida a dicha situación. Como reacción normal ante un estímulo molesto, el colectivo social buscará el remedio a esta estímulo con el criterio siguiente: encontrar aquello que sea opuesto a lo que nos causa malestar. Ahora bien, cuando se reacciona en contra de un sistema, no sólo se reacciona en contra de sus rasgos negativos, sino que se rechaza en bloque y se busca su opuesto. Contra la corrupción y la demagogia, se buscará un rigor extremo; contra la pasividad, el fanatismo.Este tipo de solución acarrea, por su misma naturaleza, males mayores que aquellos que pretenden evitar.Así, la reacción contra la deformación de la democracia capitalista en el período de entreguerras fue una de las causas del advenimiento de los totalitarismos.

CONDENA TOTAL DEL CAPITALISMO

El capitalismo ha envilecido al hombre en la mediocridad del dinero. El mundo del dinero, es el mundo de la facilidad. Conduce infaliblemente a la decadencia de la posesión

RAZONES PARA EL SOCIALISMO

El Sermón de la Montaña
"Por eso os digo: no andéis inquietos por vuestra vida, qué comeréis, ni por vuestro cuerpo, qué vestiréis. ¿No es más el alma que la comida, y el cuerpo que el vestido? Mirad las aves del cielo, que ni siembran, ni siegan, ni recogen en graneros, sin embargo, vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros más que ellas? [...]. Mirad cómo crecen los lirios del campo; no trabajan ni hilan. Pero os aseguro que ni Salomón en todo el esplendor de su gloriase vistió como uno de ellos. Pues si el heno del campo que hoy es y mañana va al horno, lo viste Dios así, ¿cuánto más hará con vosotros, hombres de poca fe?"Evangelio de Mateo 6,25-30.

Saturday, October 14, 2006

OM MANI PEDME HUNG

Tuesday, October 10, 2006

ACTITUDES QUE IMPIDEN LA PAZ

¨INDIVIDUALISMO
Se trata de una de las caras del orgullo, ya que uno cree que no necesita a nadie. Hay que reconocer la necesidad de tener amigos, de sentirnos amados. Tampoco podemos pensar en vivir aislados de los demás, ya que todo ser existente es una interpelación que se nos dirige y a la que hemos de res­ponder; la indiferencia no es una respuesta valida.
Antídoto: la solidaridad y la amistad.

¨ PODER
Es una mezcla de miedo a los demás y de orgullo. El ansia de poder sobre las otras personas, además de elementos de sobrevaloración de la propia persona, esconde una inseguridad en la relación con los demás como perso­nas iguales en dignidad. Cuando uno no se atreve al diálogo, se impone. La opresión es una expresión de ello.
Antídoto: la madurez, el diálogo y el respeto.

¨AMBICIÓN
Es agotadora porque es inagotable. Lleva a la infelicidad, porque marca su meta en un imposible: siempre espera más. Es una falsa esperanza de pro­greso que no te permite disfrutar del presente y evolucionar, realmente. Además, no se percata de que lo más importante en la vida proviene siempre de la re­lación con otros, no de lo que uno mismo consigue.
Antídoto: El realismo, la solidaridad y la gratuidad.

¨MÍEDO
Inmoviliza a la persona impidiéndole ser con plenitud. En ocasiones se pre­tende disfrazarlo de prudencia, pero carece de la fuerza que ésta tiene para intentar hacer posible aquello en lo que cree. La persona que vive con mie­do, está en permanente conflicto consigo misma y esto enturbia sus relacio­nes.

Antídoto:El conocimiento y la aceptación de uno mismo y de los demás.


¨RESENTIMIENTO
Es una especie de velo que impide ver con claridad el presente y vivirlo en paz. A menudo el origen es absurdo y mantenerlo aún lo es más, ya que es estéril.
Antídoto: El perdón y la reconciliación.

¨INJUSTICIA
Mientras exista algún tipo de injusticia, no será posible la paz, ya que alimen­ta los resentimientos, los recelos y los anhelos de represalia. La marginación es una clara muestra de injusticia hacia unos seres que viven en condiciones inaceptables.
Antídoto: La justicia, la solidaridad.

¨ COACCIÓN
Es un ataque a la libertad de la persona. El respeto a la libertad es uno de los fundamentos básicos sobre los que puede edificarse una sociedad en paz, y que ésta no sea un equilibrio de fuerzas, sino la adhesión voluntaria y cons­ciente de las personas al hecho de vivir en sociedad de forma gratificante pa­ra todos.
Antídoto: El respeto a la libertad y la educación de la misma.

¨EGOÍSMO
Consiste en mirarlo todo desde el propio punto de vista, con lo que la visión que se obtiene es siempre muy pobre. El egoísta está inutilizado para partici­par en trabajos comunes, como puede ser el trabajo por la paz. Aquél que lo desea todo para sí mismo, consigue no tener nada que valga la pena, por­que está ocupado protegiéndolo, con lo que pierde la oportunidad de disfru­tarlo y compartirlo con los demás. El egoísta vive y muere solo.
Antídoto: La justicia, la gratuidad, la benevolencia.

¨ENVIDIA
El envidioso sufre el doble, porque es lo suficiente realista como para recono­cer los cosas buenas de los otros. Pero al desearlas para sí mismo, es inca­paz de alegrarse por el hecho de que otro las tenga. La envidia es fuente per­manente de conflicto, puesto que siempre existen en los demás cualidades que nosotros no poseemos.

Antídoto: Convivencia (que muestra la riqueza de la pluralidad), la ale­gría de ser como soy.

Monday, October 09, 2006

MEDITACIÓN DE TARA


Tara -la liberadora- es un buda que representa las actividades expertas de los seres iluminados o los medios por los cuales comunican con nosotros y nos guían según nuestra capacidad. Contemplar a Tara proporciona resultados rápidos en lo que queremos y necesitamos. Conocida como la "Madre de todos los Budas", es también nuestra madre porque despierta y ayuda a realizar nuestro potencial para lograr la iluminación.
LA PRÁCTICA

Relaja tu cuerpo y calma tus pensamientos. Piensa que vas a hacer esta meditación para el beneficio de todos los seres vivientes. Visualiza en el espacio frente a ti a Tara, manifestación de todo lo positivo. Su cuerpo translúcido y resplandeciente es de luz esmeralda. Puedes visualizarla del tamaño que quieras.

Su pierna izquierda está doblada -esto simboliza el control completo de la energía sexual- y la derecha, extendida -simbolizando que está presta a levantarse para ayudar a todos los seres-. Su mano izquierda, en el corazón, muestra el gesto del refugio: la palma hacia fuera, el pulgar y el anular se tocan y el resto de los dedos levantados. Su mano derecha está sobre la rodilla derecha en el gesto de conceder las realizaciones sublimes: la palma hacia fuera, el pulgar y el índice tocándose y el resto de los dedos apuntando hacia abajo. En cada mano sostiene el tallo de una flor azul, símbolo del canal central desbloqueado. Tara es de una belleza exquisita y te sonríe amorosamente. Sus ropas son de sedas celestiales y sus ornamentos de piedras preciosas. Concéntrate por algún tiempo en la visualización, abriendo tu corazón a la energía del amor bondadoso e inexhausto de Tara.
Ahora piensa en tus problemas, necesidades y esperanzas y pide de corazón a Tara que te ayude. Ella responde inmediatamente enviándote una corriente de luz: luz blanca de su frente que viene hasta la tuya, eliminando todos los obstáculos y negatividades del cuerpo; luz roja que viene desde su garganta hasta la tuya y elimina todos los obstáculos y negatividades del habla; y luz azul que viene de su corazón al tuyo, eliminando todos los obstáculos y negatividades de la mente. Visualízalos por turnos; siente que ahora estás completamente libre de todos los problemas y que has recibido la inspiración y la energía para alcanzar todos los objetivos. Ahora, Tara viene sobre tu cabeza mirando en la misma dirección que tú. Se disuelve en luz verde que desciende por tu coronilla hasta el centro de tu corazón, donde reside tu conciencia. Tu mente se funde, indistinguible de la mente de Tara; y experimentas claridad, tranquilidad y gozo. Permanece en ese estado tanto como te sea posible. Cuando aparezcan pensamientos, obsérvalos con desapego, sin juzgarlos buenos ni malos, y dirige de nuevo tu atención a la experiencia de la claridad y gozo. Al final de la sesión, dedica la energía positiva que hayas generado a todos los seres vivientes para que puedan alcanzar el gran gozo de la liberación de la confusión y del sufrimiento.

Saturday, October 07, 2006

SOCIALISMO DEL SIGLO XXI

Las ocho dimensiones del "Socialismo del siglo XXI"

la dimensión económica
la dimensión social
la dimensión política
la dimensión cultural
la dimensión ecológica
la dimensión ética y estética
la dimensión humanista
la dimensión tecnológica

El Socialismo Venezolano del siglo XXI debe ser original : NI TOTALITARIO, NI COLECTIVISTA , NI MILITARISTA , NI PERVERSO.

CONDENA TOTAL DEL CAPITALISMO

El capitalismo ha envilecido al hombre en la mediocridad del dinero.El mundo del dinero, es el mundo de la facilidad. Conduce infaliblemente a la decadencia de la posesión.

EL SOCIALISMO y EL CONCEPTO DE PERSONA

De entre todos los seres del mundo , sólo el ser humano es capaz de reconocer el bien y el mal, de pensarlos, de hablar y reflexionar sobre ellos e incluso de negar su existencia . Los demás seres reconocen por instinto aquello que le es favorable o desfavorable para su supervivencia o la de su especie; el ser humano califica los actos, los hechos , las palabras, los objetos e incluso los pensamientos como "buenos" o "malos", y el criterio con el que lo hace no es siempre el mismo, ni depende tampoco de la mera supervivencia biológica. Así pues, siendo el ser humano el único ser del mundo para quien tiene sentido la noción de bien y de mal, sería conveniente iniciar un estudio sobre la realidad del mal en la persona explicando en primer lugar qué entendemos por esa persona capaz de pensar y nombrar el mal.

BUDHA

Friday, October 06, 2006

BUDA


Buda ha sido una de las personas que más ha indagado en la mente humana y en el sufrimiento innecesario que ésta se origina a ella misma y a las demás criaturas debido a su osfuscación fundamental , por la cual el individuo acarrea un montón de cosas nocivas.

Tuesday, October 03, 2006

EL BUDISMO



El fundador histórico del Budismo fue el príncipe Gotama, el sabio del clan de los Sakya (Sakyamuni), más conocido como Sakyamuni Buda, quien nació, vivió y murió en el norte de la India, alrededor del siglo V antes de Cristo. Sakyamuni Buda alcanzó la iluminación o la visión de la verdadera naturaleza de la existencia, aproximadamente a los treinta años, después de seguir distintas prácticas de autocontrol, autoobservación y meditación. La muerte le sobrevino a la edad de ochenta años. Entre ambos acontecimientos, el Buda estuvo predicando incansablemente su doctrina durante cincuenta años. Durante este tiempo pudo desarrollar su propia experiencia individual y enseñada de manera muy variada, según la calidad y la profundidad de espíritu de las personas ante las que predicaba. A lo largo de estos cincuenta años de predicación, su enseñanza se fue manifestando cada vez más amplia, más profunda, más sutil, evolucionando desde los principios iniciales, que todo el mundo podía comprender fácilmente, hasta una compleja cosmovisión que requería una experiencia espiritual profunda para ser captada. Este hecho marcó la historia del Budismo y fue una de las causas de la posterior aparición de innumerables escuelas budistas centradas sobre talo cual aspecto en particular.
Después de la desaparición del Maestro, la comunidad de monjes que se había formado de manera flexible y natural a su alrededor, sin Escrituras ni instituciones, intentó organizarse y fijar la Enseñanza. Un año después de la muerte del Buda tuvo lugar el concilio de Rajagaha. En él se reunieron más de quinientos monjes alrededor de los principales discípulos, especialmente Mahakashyapa, Ananda y Upali. Estos dos últimos recitaron de memoria la enseñanza del Buda tal y como la habían oído durante los años que siguieron al Maestro. La asamblea aprobó y certificó esta enseñanza y de esta manera quedó establecido el primer canon budista llamado tripitaka (tres cestos) más tarde, cuando por fin fue puesto por escrito. No obstante, es posible suponer que este canon no recogió todas las variadas enseñanzas expuestas por Sakyamuni Buda durante cincuenta años de predicación, sino que se dio preferencia a aquellas que parecían de suma importancia y provecho para la conservación inmediata y : supervivencia de la orden religiosa.

BUDISMO MAHAYANA E HINAYANA
El siguiente concilio tuvo lugar cien años más tarde, en la ciudad de Vaisali. Parece ser que la razón principal de este segundo concilio fue la de esclarecer las diferencias que habían surgido en el seno de la comunidad respecto a la interpretación de los preceptos morales que regían la vida del monje. A partir de este concilio la comunidad quedó dividida en dos grupos: uno que defendía la observancia estricta de los preceptos morales y se ceñía a los principios de la enseñanza considerándolos inmutables y fuera de toda interpretación, y otro para el cual los preceptos morales debían ser vistos con una nueva luz teniendo en cuenta el marco socio- cultural de la comunidad. El primer grupo fue conocido con el tiempo con el nombre de Theravada “Doctrina de los Antiguos”, y también Hinayana o “Pequeño Vehículo”, mientras que el segundo sería conocido como Mahasanghika o “Miembros de la gran comunidad” y también Mahayana o “Gran Vehículo”. De hecho, las diferencias entre ambas ramas estriban en algo más que en la interpretación de los preceptos morales. En efecto, la práctica Theravada encajaba más en el ascetismo riguroso al que se había entregado la orden, llegando a adquirir una fuerte conciencia de sí misma como clase especial de la sociedad, apartada de los quehaceres comunes de los hombres y entregada a prácticas religiosas especiales. Por el contrario, las proposiciones Mahayanas presentadas en este concilio y defendidas especialmente por los monjes Vajji, argumentaban que el Budismo iba dirigido a todos los hombres y mujeres de la sociedad, por lo cual abogaban por romper el caparazón estrecho de la disciplina que los mantenía aislados de los hombres de su tiempo. Criticaban el hecho de que la orden se había convertido en una clase social especial, poseedora del Dharma y extremedamente celosa de él. En definitiva, abogaban por un retorno al espíritu original del Buda Shakyamuni.
No en vano este concilio tuvo lugar en la ciudad de Vaisali, patria del famoso practicante laico Vimalakirti, encarnación del espíritu Mahayana, cuya figura y enseñanza dio lugar al Sutra de Vimalakirti . Vaisali era además un floreciente centro de comercio libre y también la capital de los Vajji una confederación de cinco clanes que tenían una forma republicana de gobierno, el cual era ejercido por representantes elegidos en los clanes. En esta atmósfera progresista y cosmopolita es fácil imaginar que surgiera un movimiento opuesto al rumbo que estaba tomando la orden budista.
Sea como sea, a partir de este concilio las diferencias se hicieron patentes y surgieron estas dos ramas, que a su vez se subdividieron en otras tantas, según distintos criterios de interpretación. Esto no es de extrañar, sobre todo si se considera que el Buda mismo dijo que nunca había tenido la intención de dirigir una gran organización religiosa. En la India, además, el Budismo se desarrolló en forma de una serie de grupos bastantes autónomos diseminados por el país. Debido a la dificultad de comunicación, era imposible coordinar las actividades de todos ellos, tan desparramados, bajo una única autoridad central.
En cuanto a la doctrina, las diferencias entre los seguidores del Gran y del Pequeño Vehículo se fueron haciendo cada vez más evidentes. Los miembros del Hinayana seguían al pie de la letra una interpretación simplista de las Cuatro Nobles Verdades enseñadas por el Buda, a saber:
1.La existencia es sufrimiento.
2.El apego y el deseo son las causas del sufrimiento.
3.El
nirvana es la completa liberación del deseo, y del sufrimiento.
4. El Sendero Octuple es la vía para llegar al nirvana.
De esta manera, la liberación individual, la entrada en la completa extinción del nirvana, se convirtió en la meta principal y el arhant, el liberado, en el modelo espiritual que se habría de seguir. Para conseguir el nirvana, el monje debía apartarse totalmente del mundo y entregarse a prácticas ascéticas, cuyo seguimiento hacía imposible cualquier contacto con los hombres del siglo.
No puede decirse que los principios Mahayana se opusieran a los Hinayanas, sino más bien el Mahayana integró y superó estos principios, alcanzando una visión y una experiencia espiritual más amplia, más real, en tanto que incluía y hacía participar a todos los seres de esta experiencia. Llevado a su exposición más elevada, el Mahayana predica la no-dualidad entre nirvana y samsara (mundo del sufrimiento y de los deseos), dualidad surgida de la ignorancia, causa última del deseo (incluso del deseo de alcanzar el nirvana), del apego y del sufrimiento. La liberación del sufrimiento y de los puntos de vista ilusorios no es pues el resultado del abandono del samsara y de la entrada en el nirvana, sino la realización espiritual de la verdadera naturaleza del mundo: naturaleza no , dual y vacua.
De esta manera, el Mahayana se convirtió en una vía de salvación universal, no reservada a la clase monástica, y el modelo pasó a ser el del bodhisattva o Buda viviente, es decir, aquel que habiendo comprendido el verdadero carácter de la existencia, permanece en el mundo del sufrimiento con el fin de ayudar a todos los seres hacia la verdadera budeidad. Por lo cual el bodhisattva necesita dos facultades esenciales: capacidad de penetrar en la verdadera naturaleza de los fenómenos, más allá de su aparente contradicción y medios hábiles -es decir, libertad de acción, utilización de cualquier medio-, para conducir a los seres hasta la budeidad.
Con el tiempo la especulación filosófica fue aumentando en el seno del Budismo indio, multiplicándose las escuelas y las comunidades y alcanzando a muchos grupos sociales y áreas geográficas nuevas. La primera gran difusión tuvo lugar bajo el reinado del emperador Asoka, en el siglo III antes de C. Por esta época, los misioneros budistas alcanzaron , los reinos griegos de Oriente y Ceylán, donde se redactó el Canon Pali. Desde el siglo I a.d.C. al siglo I d.d.C. tuvo lugar la expansión fuera de India, bajo la poderosa dinastía de los Kuchanes. En el siglo I penetró en China. De esta época es también el arte greco-budista de Gandhara, fruto del encuentro de las imaginerías mediterránea e india.

LA ESCUELAS MADHYAMIKA Y YOGACARA

Los primeros siglos de nuestra era (del s. I al IV) fueron los más brillantes del Budismo indio. Fue en esta época cuando se desarrolló el Gran Vehículo, a pesar de que ambas corrientes, Hinayana y Mahayana, continuaron existiendo juntas, a veces en un mismo monasterio. Pero poco a poco el Gran Vehículo eclipsó al antiguo, el cual permanecerá en el sur de la India, Ceylán, Birmania, Camboya...
El Mahayana alcanzó la máxima amplitud gracias a eminentes maestros, místicos y filósofos tales como Nagarjuna (250-300 aprox.), Asanga y su hermano Vasubandhu (fin del s. IV), fundador el primero de la escuela Madhyamika o Escuela del Término Medio, y los últimos de la escuela Yogacara o Vijñanavada, "Unicamente conciencia", las cuales se convertirían en las dos alas del Mahayana.
El Hinayana ponía el énfasis en el deseo como causa del sufrimiento y de las tribulaciones, deseo que nos encadena al mundo del samsara. Al mundo del samsara oponían el mundo del nirvana, o cesación de toda forma de deseo, paz absoluta. El Dharma era el camino que conduce a este nirvana, camino de renunciamiento, de ascesis, de aislamiento del mundo.
La Vía del Término Medio del Mahayana expuesta por Nagarjuna no niega la validez de estas proposiciones, pero las trasciende al sumergimos en el mundo de la auténtica realidad: es la mente ignorante la que crea una división del mundo extrapolándolo en pares opuestos: ilusión-iluminación, samsara-nirvana... Por lo tanto, querer abandonar el samsara para alcanzar el nirvana es todavía otra forma de ilusión, de ignorancia. Nagarjuna pone el énfasis en el despertar de la sabiduría (prajna) o visión iluminada de la verdadera naturaleza vacua de los fenómenos.
Así, la enseñanza predicada por el Buda alcanza una gran dimensión con la doctrina Madhyamika.
“Nada aparece, nada desaparece” es la concepción y la experiencia central del Mahayana, la realización de la identidad de todas las cosas en lo Increado -en la vacuidad-, ya que creación y destrucción son fenómenos percibidos solamente por la conciencia ignorante.
La doctrina Madhyamika es inmensamente sutil y profunda como para poder tratar la aquí. Es suficiente saber por el momento que su impronta en el Budismo Mahayana fue decisiva para la formación de esta corriente dentro del Budismo, corriente que, con el tiempo se volvería la más numerosa y extendida.
La Escuela Yogacara o Vijñanavada, la otra ala del Mahayana, resalta por la originalidad, el poder y la profundidad de sus concepciones. Su fundador fue Asanga y en cierta medida su hermano menor Vasubandhu. Para esta escuela, la conciencia (vijñana) es lo único que existe. Todas las formas de vida, todos los aspectos de la experiencia existencial están sostenidos por la conciencia. Nada puede ser explicado sin ella: el mundo en el que viven los seres es el fruto de su conciencia. La conciencia impura del ignorante fabrica un mundo troceado, escindido, confuso, contradictorio, mientras que en la conciencia inmaculada del bodhisattva, el samsara no es diferente, del nirvana. Ya en los antiguos textos budistas encontramos:

- "El mundo es conducido por la conciencia, es regido por la conciencia, todo obedece a una sola cosa: la conciencia.”

- “Debido a las manchas de la conciencia, los seres son impuros. Cuando se purifica la conciencia, los seres son purificados.”

La conciencia, en sí misma pura y una, indiferenciada, luminosa por sí misma, es idéntica a lo absoluto, a la vacuidad. Nada sucede fuera de la conciencia. Todo cuanto ocurre, ocurre en la conciencia. La Escuela Yogacara tendría una gran influencia en todo el Budismo Mahayana, tanto en el Budismo Tibetano como en el Zen.